Pensamientos de Amir: Mi experiencia en Hawthorne High School

Hawthorne High School me ha enseñado muchas lecciones. A lo largo de mis cuatro años de asistencia, he notado muchas cosas que he hecho de manera diferente a lo largo de los años. A través de primer año, segundo año, junior y ahora senior, he cambiado notablemente.

 

Al comenzar mi primer año, estaba nerviosa por los cambios que estaban por venir. No sabía qué esperar de la escuela: durante las primeras semanas me perdería por la escuela. Y como si mis nervios no estuvieran lo suficientemente locos, continuar con el trabajo escolar era solo un estrés adicional. Nunca antes me habían dado tanto trabajo y casi no podía mantenerme concentrado y seguir esforzándome. Tuve que madurar y darme cuenta de que tenía que hacer mi trabajo.

 

Llegó el segundo año y todavía estaba un poco nerviosa, preguntándome si habría mucho más trabajo, nuevas caras y acostumbrarme a los nuevos maestros. A estas alturas ya había memorizado la ubicación de las habitaciones y había empezado a sentirme más cómodo al venir a la escuela. Ya no me preocupaba perderme más. Una mayor preocupación seguía siendo mi trabajo; Sin embargo, empujé a través y lo hice. Al final de mi segundo año, me había dado cuenta de que estaba a mitad de camino. En el segundo año aprendí las cosas de las que era capaz, como hacer mi trabajo.

 

El año junior fue tan rápido como cualquier otro año. El año pasado estuve menos preocupado por mi trabajo. Esto es porque se había vuelto más fácil. Acostumbrarse al camino de la escuela fue la parte más importante. Ya conozco a la mayoría de los maestros, sé cómo funciona la escuela y sé cómo me muevo. El único problema era que estaba anticipando el último año, el año más divertido y estresante. Durante mi penúltimo año me di cuenta de que no debía perder la escuela secundaria y esforzarme un poco más en el último año.

 

Hasta ahora, el último año ha sido muy estresante, pero también ha sido muy divertido. Mi trabajo ya no es tan difícil, conozco a todos mis maestros y encontré formas de hacer que la escuela sea divertida. Yo había hecho de la escuela un mejor ambiente para mí misma al aprender a seguir el flujo y simplemente disfrutar el resto de mi tiempo en la escuela secundaria. El último año me hizo darme cuenta de lo rápido que puede pasar el tiempo, aprendí a administrar mi tiempo ya disfrutar de mi tiempo. Por mucho que quiera irme, siempre recordaré cómo me cambió la escuela.